La conductora de televisión Inés Gómez Mont, quién está casada con Víctor Álvarez Puga, expresó en un nuevo comunicado, a través de su cuenta de Instagram, que tiene mucho temor ante las órdenes de aprehensión que se han presentado en su contra, y destacó que un juez ordenó encarcelarlos a ella y a su esposo en una prisión de máxima seguridad.
En ocasiones anteriores, Inés Gómez Mont ha sostenido que demostrará su inocencia ante este caso que la enfrenta con autoridades mexicanas, y que ella considera “una injusticia”.
Por la situación, se sabe que la Fiscalía General de la República (FGR) solicitó a la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) la emisión de una ficha roja para localización y captura de la conductora y su esposo, el abogado Víctor Manuel Álvarez Puga.
Al matrimonio se le relaciona con un presunto desvío de unos 3 mil millones de pesos de la Secretaría de Gobernación en la administración del expresidente de México, Enrique Peña Nieto.
Inés Gómez Mont dice temer a “persecución de mala fe”
En su nueva publicación, Inés Gómez Mont señala que las autoridades están solicitando más órdenes de aprehensión en su contra que revelan “la persecución de mala fe” de la que son objeto ella y su esposo.
“Como lo anticipé en el comunicado anterior, he sido informada que autoridades están solicitando más órdenes de aprehensión en mi contra. Ahora por asuntos fiscales por los que ya tenía acuerdos conclusivos con el SAT y Prodecon. Estos abusos se suman a los reportados en la prensa que revelan la persecución de mala fe de la que mi esposo y yo somos objeto”.
La presentadora destacó tres puntos reportados por los medios de comunicación:
- El procurador fiscal Carlos Romero Aranda inició un proceso legal en su contra, aun cuando no tenía facultades legales para hacerlo: “No estaba autorizado legalmente. De ese tamaño su sed de persecución en nuestra contra”
- El 10 de septiembre de 2021, autoridades (Inés desconoce cuáles) le “mintieron a la prensa y al público” diciendo que existía una orden de aprehensión en su contra. Sostiene que no había tal orden en esa fecha y cree que, al parecer, era más importante para esas autoridades que ella “fuera juzgada y condenada en el foro de la opinión pública”
- El juez Zeferín Hernández, que, según Gómez Mont, era consciente de la calumnia, “se convirtió en su cómplice días después y emitió la pretendida orden de aprehensión”. Este acto, dijo la conductora, es lamentable, pues el letrado pudo haberles dado la oportunidad de acudir en libertad a desmentir cualquier imputación, pero “esa oportunidad ya no existe y el juez ordenó encarcelarnos en una prisión de máxima seguridad”
Por lo anterior, la conductora comentó que tiene temor de que estos abusos continúen.
“Aunque tengo mucho temor de que estos abusos continúen, tengo fe en que la verdad seguirá saliendo a la luz y nuestra inocencia quedará demostrada. Soy inocente y esto es una injusticia”.